Reforma Local Comercial AM
- Cliente Privado
- Localización Alicante
- PEM 11.300 €
- Arquitecto COR ASOCIADOS ARQUITECTOS
- Fotos COR asociados
COR ASOCIADOS ARQUITECTOS diseño este local comercial para una lavandería en Alicante.
Creemos que en tiempos de crisis el emprendedor necesita de nuevos soportes arquitectónicos de bajo coste que le ayuden a potenciar su iniciativa. La arquitectura ayuda a la diferenciación del negocio y también a generar un entorno más reputable que propicie que el usuario se encuentre en un espacio lleno de oportunidades.
En la actualidad, un espacio donde el usuario tiene que esperar un determinado tiempo, donde la actividad tiene que ver con el paso del tiempo, es un lugar de oportunidad para la ciudad. O dicho de otra forma, una lavandería se puede convertir en un lugar potencial donde las personas se encuentren e interactúen; y, si como en este caso, se proyecta el espacio de tal forma que permita su invasión y reformulación por parte del ciudadano, la arquitectura se vuelve una herramienta capaz de generar nuevas oportunidades y espacios de libertad en la ciudad.
Este pequeño proyecto es una nueva ventana, un nuevo horizonte donde se produce y alimenta la colectividad: experimentando, conectando y transmitiendo de manera transparente información local. Es más que un punto de encuentro, es un lugar donde se realizan cursos mientras se lava o seca la ropa, es un lugar donde se escucha música y se comparten, es un lugar capaz de albergar sin coste reuniones vecinales. Todo gracias, entre otras cosas, al uso de nuevas tecnologías que permitan amplificar las oportunidades de comunicación y por tanto ampliar los límites y la función de esta lavandería con vocación de espacio público.
Buscamos diseñar un espacio comercial capaz de ser espacio público. Donde si usas las lavadoras y secadoras hay una transacción económica, y mientras esperas te encuentras en un espacio capaz de absorber tus propuestas, tus acciones y necesidades.
La idea básica consiste en crear una zona para una estancia máxima de 90 minutos en un entorno limpio que incite a la comunicación. Esta consideración tiene su traducción arquitectónica a través de estrategias como: la posición de las máquinas respecto al mobiliario lo que provoca encuentros entre usuarios; el uso del color azul azur y el cambio de altura de los techos con el objetivo de construir dos atmósferas diferentes; la apertura de un hueco para la entrada y la no colación de una puerta.
El espacio se construye desde el límite, lo que permite que el uso y el usuario puedan operar y enriquezcan de acontecimientos este espacio, en el que cómo ejemplo, ya se han realizado audiciones, exposiciones, encuentros y charlas vecinales. Queremos construir un espacio que permita la experimentación y complementación de programas inesperados, un espacio amable al ciudadano, que lo haga sentirlo suyo, su lugar de lavar la ropa y de muchas otras cosas.